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Modelo
de Reunión de padres: Carta
de un papá de sala de 1 año (por
Carolina Trapani) |
¡Gracias
Carolina!
Modelo
de Reunión de padres:
A
los papás de sala de 1 año:
Un
día mamá y papá decidieron traerme a este mundo. Llegué
con toda la alegría, igual a la que ellos tenían cuando me vieron
por primera vez.
Cuando era bebé, necesitaba que hicieran todo por
mí, ya que yo era muy chiquito pero, poco a poco, fui experimentando con
mi cuerpo, lo que podía hacer y lo que no.
Todo estaba bien, hasta
que llegó un cambio muy importante en mi vida: había cumplido 1
año, entonces mamá y papá se dieron cuenta de cuánto
bien me haría ir en al jardín, conocer a otros nenes, jugar con
ellos, tener una sala, una seño
. En fin, un mundo nuevo, muy diferente
al que yo estaba acostumbrado.
Claro, no les voy a decir que me fue fácil
desprenderme de todo aquello que conocía y me daba seguridad, pero les
confieso que me gustaba ese lugar; sentía miedo, vergüenza y
¿qué iba hacer solo, sin mamá y papá?
Pero así
como así, fui descubriendo que había algo de mágico en el
jardín, y ya no necesitaba tanto a mamá, que me miraba medio tristona
detrás de la puerta de la salita, pero
¿cómo le explicaba
yo, que aún no manejaba mi lenguaje, que estaba feliz, que a pesar de ser
muy bajito y parecer muy indefenso, ya era una persona, que sentía, pensaba,
aunque hablara a media lengua y aún no dominara mis piernas y me cayera
al querer correr
?
¿Saben?, ya siendo grande aún recuerdo
ese momento, dicen que se llama "período de adaptación."
Ahora, cuando lo cuento, me hace mucha gracia todo aquello, pero cuando tenía
1 año lloré, y mamá lloró, y papá decía
"¡pobrecito!"
pero ¡con que ganas volvería
a empezar el jardín! Que mi maestra me recibiera otra vez con su dulce
sonrisa y me abrazara cuando yo lloraba
Hoy soy papá. Mi hijo
esta por ingresar al jardín. Tiene 1 año, y lo veo tan indefenso,
tan chiquitito, pero trato de que no se de cuenta de mi flojera ante la nueva
situación. Lo dejo en su sala, con su seño y su grupo de nenes,
me mira
no entiende, le explico
me mira
juega
y ¿yo?;
creo que yo puedo entenderlo, ya está. Él esta jugando, lo veo bien,
lo veo contento. Bueno, pasó lo más difícil, creo que ahora
tendría que hacer yo la adaptación a esta situación, donde
mi hijo por primera vez se separa de mí.
Sé que mi papá,
como yo, sintió este desprendimiento, pero
¡qué lindo
fue ir al jardín!, ¡gracias por haberme dado la posibilidad de pasar
por esta hermosa experiencia!
Un Papá de sala de 1 año.
7-3-2006