Proyectos,
ideas y actividades
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Proyecto: Salas de
4 y 5 años
"10 cuentos para la imaginación"
02-
El hornero Serafín
El
hornero Serafín puso un enorme cartel frente a su nido, que
decía: "ARQUITECTO SERAFÍN", construye su
casa de medida.
Enseguida corrió la noticia entre todos los habitantes del
bosque y sus alrededores.
Emilia, la nutria que vivía junto al río, fue la primera
en encargarle una casa nueva porque ya estaba cansada de que se le
inundara la suya cada vez que crecía el río. Y por eso
le pidió a Serafín que le construyese otra mejor.
Serafín, que era un gran arquitecto, se puso a trabajar: primero
hizo muchos cálculos, después los planos y por último,
¡una casa junto al agua y a prueba de inundaciones!
Emilia estaba requetecontenta con su nuevo hogar: era de madera, sobre
cuatro patas y con una escalera.
Claro, con una vivienda tan alta, por más que creciese el río,
¡nunca podría alcanzarla!
También el puma Matías quiso una casa mejor porque,
durante el invierno, la cueva donde vivía era muy fría
y húmeda.
Entonces Serafín le construyó una cabaña de lujo,
al pie de las sierras, con paredes de piedra, resistentes a cualquier
tormenta y una estufa de leña con una chimenea, para que las
noches de invierno no fueran tan frías. Matías podría
dormir tranquilo, aunque cayera mucha nieve.
Y Serafín se hizo tan, pero tan famoso, que un día recibió
una carta nada menos que, ¡del Polo Norte! Carolina la foca,
le encargaba una casa.
Esta vez, el hornero tuvo que consultar un enorme libro, muy morrocotudo,
para saber cómo se edificaban las viviendas en lugares tan,
pero tan requetefríos como el Polo.
Por suerte, la explicación era clara: tenían forma redonda,
se hacían con bloques de hielo y se llamaban "iglúes".
A Serafín le parecía muy extraño. Él había
trabajado con ladrillos, piedras, madera y también adobe, como
en su nido, ¡pero nunca con hielo!
A pesar de todo, puso manos a la obra y construyó un bonito
"iglú", igualito al de la foto que mostraba el libro
importante y morrocotudo.
También fabricó un cajón muy grande para meter
adentro y enviar el iglú al Polo Norte.
Los amigos de Serafín lo acompañaron al puerto y todos
juntos despacharon el gran cajón, con una etiqueta que decida:
Sra. Carolina la Foca; de parte de Serafín, el hornero arquitecto.
El viaje fue muuuy largo y el barco pasó por lugares donde
hacía muuucho calor. Y fue por ahí donde el iglú
se derritió... y el agua se escurrió entre las maderas
del cajón... y el cajón... ¡quedó vacío!
Por, eso, cuando Carolina la foca recibió el cajón vacío,
exclamó entusiasmada:
-¡Pero qué moderno! ¡Un iglú cuadrado y
de madera! -y muy contenta se instaló adentro.
Todos los pingüinos y focas del Polo, fueron a admirar el raro
iglú "último modelo" de la foca Carolina.
BARTHE,
Raquel Marta.
Actividades:
Unidad didáctica: "¿Dónde vivo?"
Preguntas
de motivación:
-
¿A qué se dedicaba Serafín?
- ¿Dónde construyó la casa del castor?
- ¿Cómo la construyó?
- ¿Cómo era la casa del oso Matías?
- ¿Qué le encargó la foca Carolina?
- ¿Cómo era la casa de Carolina?
- ¿Qué le pasó al iglú, dentro del cajón?
- ¿Cómo solucionó Carolina el problema?
Consignas:
Sala
de 4 años: - Colocar diarios debajo de la hoja y perforar con
un punzón.
Sala de 5 años: - Colocar cola vinílica de colores en
distintos recipientes y pintar con pincel grueso mojado en agua.